El fotodaño es la agresión producida por la radiación solar en la piel. A pesar de esto, el sol es imprescindible para la vida celular, además participa en la síntesis de vitamina D, necesaria para la absorción del calcio y regulación de nuestros ciclos circadianos.
Lamentablemente la radiación solar en exceso es dañina, deteriorando el sistema inmunitario de la piel, aumentando el riesgo de cáncer. Además produciendo alteraciones pigmentarías conocidas como manchas y alteraciones en el colágeno y elastina.
Por lo tanto tiene un efecto importantísimo en el envejecimiento cutáneo: disminuyendo la hidratación de la dermis y favoreciendo la liberación de radicales libres que dañan el ADN.
Las principales alteraciones en el ADN celular son los dímeros de timina que distorsionan la estructura helicoidal del ADN, con la consecuente alteración en la replicación y transcripción.
¿Como prevenir el fotodaño?
Existen diferentes pasos para prevenir los efectos del daño solar en la piel.
-Evitar exposición solar entre las 10 am y 4 pm.
-Elegir un FPS de al menos 30 y asegurarse de aplicar la cantidad adecuada para aumentar la eficacia del producto, idealmente una formula waterproof.
-Aplicar el protector solar al menos 20-30 min antes de la exposición.
-Cuidar la dieta, aumentando el consumo de vegetales y frutas especialmente las que contienen betacaroteno y vitamina C, como tomates, zanahorias y naranjas.
-El cuidado diario de la piel es esencial para restaurar la salud y belleza de esta.
Ademas de la prevención de todas estas agresiones a la piel mediante el uso de fotoprotector y evitar exposición solar en horas de máxima radiación, puede ser necesario el uso de productos reparadores:
-Vitamina C:
La vitamina C tópica inactiva los radicales libres producidos por los rayos ultravioleta, estimulando la síntesis de vitamina E, aumentando la síntesis de colágeno, favoreciendo la firmeza cutanea y disminuyendo la pigmentación.
Al elegir un producto de vitamina C debemos evaluar su capacidad de penetración en la piel. Los productos que tendrían mejor efecto son los que tienen una concentración de vitamina c o ácido ascórbico entre 5 % y 20%. Estas formulas garantizan excelente absorción cutánea y máximo efecto antioxidante.
-Retinoides:
Conocido como retinol o vitamina A, son considerados como el “gold standard” para el tratamiento de la piel. Existen múltiples publicaciones que avalan el uso del retinol en el tratamiento de la piel fotodañada.
El retinol es capaz de penetrar hasta los receptores nucleares de los fibroblastos y otras células cutáneas, estimulando la transcripción de genes y síntesis de proteínas generando aumento del colágeno dérmico. Además produce la modificación de estructuras alteradas de la epidermis y dermis superficial. También induce la expresión del receptor TGF-3 por lo cual favorece la producción de colágeno 1 y 3.
También se ha visto un mejora de la vascularización en la piel fotodañada.
Todo esto lleva a una reducción de las arrugas finas y profundas por aumento de los depósitos de colágeno en la dermis papilar, disminución de las lesiones pigmentarías y mejorando el tono general de la piel del rostro.
-AHAS: El más común es el ácido glicólico, tiene muchos efectos positivos al incorporarlo en nuestras rutinas de belleza, es un exfoliarte que al no dañar en concentraciones adecuadas va a permitir una renovación de la piel, también puede contribuir a la hidratación. Lo que va a favorecer directamente la disminución de arrugas finas.